Kata-Tjuta (Las Olgas)

El despertador suena a las 4:30 de la mañana. A las 5 abre el Parque y queremos llegar antes del amanecer hasta el lugar para ver la salida del sol en Kata-Tjuta. Según la información del Parque será a las 5:52 y nos lo queremos perder!

Aunque mucho menos conocido que su vecino, Kata- Tjuta es la otra gran atracción de este Parque Natural. Se encuentra a unos 40 kilometros de Uluru, aunque se puede apreciar desde casi cualquier sitio en el Parque.

Aunque llegamos de los primeros, ya hay algunos autobuses y todo el mundo está un poco apiñado a ver quien pilla la mejor foto... el ambiente no es perfecto, y de nuevo como nos pasó ayer, el lugar por donde sale el sol no le da protagonismo a las rocas... en todo caso es un bonito amanecer en el horizonte y podemos ver como Kata-Tjuta se va despertando.

Desde allí temprano nos dirigimos al Valley of the Winds (“Valle de los Vientos”), que es la ruta que queríamos hacer el dia anterior pero estaba cerrada, y la cual en 3-4 horas permite transitar por los senderos entre los enormes monolitos y disfrutar de multitud de perspectivas de los mismos.

El sitio es una pasada. El camino, a veces exigente, te va llevando al principio alrededor de algunas de las rocas, para luego ir adentrándose entre ellas.

Sorprende que esta zona no es tan árida.  Multitud de arbustos e incluso algunos árboles, llamados robles del desierto, son capaces de sobrevivir con condiciones mínimas de agua. Eso sí, el rojo se impone en el paisaje tanto en las formaciones rocosas como en el suelo.

En el camino hay un par de puntos clave, a modo de miradores, uno de los cuales ofrece una vista majestuosa del valle que se crea entre dos de las enormes rocas. Tanto a un lado como a otro, la vista es sobrecogedora, y el viento sacude con fuerza haciendo honor al nombre.

Kata-Tjuta quiere decir en lengua aborigen “muchas cabezas”, describiendo las más de 30 enormes rocas que forman este conjunto. En inglés su nombre es "The Olgas" porque la más alta de las rocas es llamada Mount Olga.

Como Uluru, este es también un lugar sagrado para la cultura aborigen, ya que además de suponer en el pasado un oasis en el desierto, tradicionalmente poseía un simbolismo especial como el enclave en el que transmitir las enseñanzas y los rituales a los jóvenes que alcanzaban la condición de adulto. También, cada una de las formaciones tiene un significado y una historia asociada a la mitología del Dreamtime.

Continuamos deleitándonos con las vistas a paso tranquilo pero sin pausa porque el sol  comienza a apretar de lo lindo. Son casi las 11 cuando terminamos y ahora entendemos porque no permiten el acceso a partir de esa hora. La ruta es dura a tramos y a esa hora no hay manera de escapar del sol, con lo que no se puede disfrutar… desde luego ha merecido la pena el madrugón!

Es cerca de mediodía, y ya está todo hecho, ya hemos aprendido que en pleno desierto se vive a otro ritmo y hoy si que nos hemos amoldado. La mañana ha sido genial, así que ponemos rumbo al camping, aunque aún tenemos tiempo de deleitarnos de algunas vistas alucinantes en el camino de vuelta.

Estamos en las peores horas del día. En la furgoneta no se puede estar y en el camping  no abundan las sombras…  menos mal que el camping tiene piscinita, así que podemos tirarnos un ratillo después de comer. 

Nos queda volver al Parque para ver la puesta de sol y de paso aprovechar para echar unas fotillos, ahora que la luz empieza a hacer brotar colores diferentes sobre Uluru, y que tenemos la suerte que han aparecido algunas nubes que lucen guapísimas en el cielo azul.

Finalmente nos decidimos por ir a ver la puesta de sol al mismo lugar desde donde hemos visto el amanecer en Kata- Tjuta con la esperanza de esta vez sí ver la silueta y el sol cayendo detrás de las rocas. Sin embargo de nuevo no es así, la vista es bonita, pero las nubes se han ido acumulando y no dejan que el atardecer adquiera su plenitud.

Da igual, esta vez lejos de las aglomeraciones hemos podido cerrar un día estupendo y tenemos fuerzas para darnos otro madrugón mañana…